A 15 años de la llegada de un destacamento invencible

   Hace hoy, 15 años, que el Che y sus compañeros caídos en Bolivia reposan en el Memorial del Complejo Escultórico Ernesto Guevara, de esta ciudad, hecho que se recuerda en todas las latitudes del planeta.
  La plaza, levantada en la central provincia cubana en 1988, parecía esperar el regreso, después de 30 años de sepultado el cuerpo del héroe, en la pista de aterrizaje del aeropuerto de Valle Grande, en la nación sudamericana.
   El hallazgo resultó del quehacer científico de cubanos y argentinos, motivados por la admiración hacia el hombre que representa una luz de esperanza para las mayorías oprimidas del mundo.
   Una población conmovida recibió al Guerrillero Heroico  en el recorrido desde La Habana hasta Santa Clara, ciudad esta última, donde libró su más importante batalla al frente de la columna Ocho Ciro Redondo, del Ejército Rebelde.
    Durante tres lustros, unos tres millones 130 mil personas, se han acercado al Memorial, más de la mitad de ellos, procedentes de variadas naciones del planeta, hasta donde llega el legado de un hombre, que como una clarinada,  murió por la defensa de los pobres y marginados.
   Estudiantes, trabajadores, jubilados y pueblo en general, honraron al héroe en octubre de 1997 y le custodiaron hasta su última morada, donde le acompañan cotidianamente, con el compromiso de ser más eficientes, mejores estudiantes o profesionales, fieles a la Revolución.
   En la plaza aún retumban las palabras de Fidel Castro, líder de la Revolución Cubana, en aquella jornada memorable: Con emoción profunda vivimos uno de esos instantes que no suelen repetirse. No venimos a despedir al Che y sus heroicos compañeros. Venimos a recibirlos.
   “Veo al Che y a sus hombres como un refuerzo, como un destacamento de combatientes invencibles, que esta vez, incluye no solo cubanos sino también latinoamericanos que llegan a luchar junto a nosotros y a escribir nuevas páginas de historia y de gloria”, aseveró.
   Por eso no falta una flor fresca cada mañana ante los nichos de los héroes.