Activo movimiento sísmico en zona central de Cuba

   La tierra se sacudió en Villa Clara cinco veces en lo que va de año, y aunque sin daños humanos y materiales resultaron sucesos  de una frecuencia poco usual en esta área de la geografía cubana.
   De acuerdo con reportes oficiales, buena parte de la población de la provincia percibió los movimientos telúricos como sucedió el cuatro de febrero, en Quemado de Güines y  el 15 de agosto, en Remedios y Caibarién.
   Para el día 19 de noviembre se reservaron dos temblores y otro, el 26 del propio mes, advertidos por habitantes de Encrucijada, Santa Clara, Caibarién y Camajuaní, Cifuentes y Calabazar de Sagua.
   Según estudiosos del tema, los sismos son fenómenos geológicos que ocurren repentinamente, producto de la liberación súbita de la energía acumulada en el interior de la Tierra.
   Tomás J. Chuy, experto del Centro de Investigaciones Sismológicas de Santiago de Cuba, informó a la AIN que en la región central existen cuatro zonas fundamentales donde se reportan la mayoría de los terremotos.
   Esas áreas de actividad sísmica están situadas en Remedios-Caibarién -Yaguajay,  Trinidad-Topes de Collantes, Falla-Morón y Sagua la Grande- Corralillo, agregó.
   El investigador titular significó que existe un reporte de movimiento telúrico en 1824, en Sagua la Grande, fenómeno que se reitera en la zona norte de la provincia durante los siglos XIX y XX e incluye a Isabela, Corralillo, Quemado de Güines-Caguaguas, Viana y San Vicente.
   Destacó que el temblor del 15 de agosto de 1939  se considera el más significativo ocurrido en la región central, con una intensidad de 5,6 en la escala de Richter, perceptibles en Caibarién y Remedios, donde provocó afectaciones en el edificio del hospital.
   Alberto Hernández, poblador de Encrucijada, subrayó que los recientes estremecimientos de la tierra en la localidad y la vecina Calabazar de Sagua, resultaron novedad para los vecinos.
    Añadió que muchos habitantes de la zona observaron la vibración de vajillas y sacudida de las casas, sin que se reportaran afectaciones a las personas, ni daños materiales.